El túnel

Cada día se hace un poco más difícil intentar lograr un par de fotos instantáneas (las legendarias Polaroid) de la realidad que nos rodea porque todo parece que necesita de una serie de retoques para ser de tal o cual manera. Nada es lo que parece o percibimos. De hecho hemos sido tan atrevidos de crear el efecto “Polaroid” con el objeto de recrear las imperfecciones de aquello que supo ser real.

En esa lógica se maneja buena parte de la política: no se muestran tal cual son para luego hacer hasta lo imposible para simular ser auténticos de acuerdo a parámetros sugeridos con tal de conformar o engañar a la mayor cantidad de desprevenidos. Los desprevenidos seríamos nosotros.

Todo el circo que rodea algunas decisiones que se toman en la órbita municipal es impropio de la seriedad y capacidad de algunos de sus actores. Algo no está funcionando cómo debería hacerlo.

Ninguna persona en su sano juicio puede creer que una batalla sin cuartel contra la nueva “casta de los empleados públicos municipales”, una minoría insignificante para el conjunto de la sociedad, puede tomar ribetes de cruzada en épocas de enemigos ocasionales. Es verdad que seguramente algunos vecinos tienen una imagen negativa de los empleados públicos y los ubican como responsables de las injusticias cotidianas, pero está bastante claro que de existir mala praxis la responsabilidad debe recaer sobre sus superiores y en última instancia sobre el mismísimo Intendente, de ahí a dar inicio a un diferendo del calibre que estamos observando y que se vincula con un derecho consagrado en nuestra Constitución Nacional, existe un abismo que no puede no ser tenido en cuenta por los operadores políticos del jefe comunal. Algunos parecen estar invitándolo a entrar a un túnel del que políticamente no muchos lograron salir ilesos.

Desde ya que el de la esencialidad no es el único proyecto del Ejecutivo que mantiene en vilo al Deliberativo, pero es el que quizás genere la primera fisura en la coalición de gobierno. La iniciativa será tratada en 4 comisiones internas del Concejo Deliberante: la primera escala será la comisión de Ambiente, Desarrollo Sostenible y Servicios Sanitarios, para luego recalar en la de Educación, Cultura Ciencia e Investigación y Salud comunitaria y desarrollo humano, para finalizar en la comisión de Legislación, Interpretación y Reglamento.

Es verdad que es un recorrido legislativo bastante largo, también es cierto que dos de esas comisiones están presididas por ediles radicales y una por concejal del arco opositor.

A esta altura se supone que Florencia Ranellucci convocará el próximo 25 de abril o quizás el 2 de mayo a la comisión de Ambiente, Desarrollo Sostenible y Servicios Sanitarios e incluirá el tema en el orden del día. Esta comisión tiene por objeto tratar todo asunto relacionado con el funcionamiento, administración y dirección de los servicios que presta Obras Sanitarias Sociedad de Estado.

En cualquier escenario el proyecto contará con el aprobado de dicha comisión ya que se supone que los libertarios locales apoyarán una iniciativa que encaja a la perfección con el cancionero de Javier Milei, el PRO podría prescindir del voto del concejal radical Daniel Nuñez. Algo similar ocurre en la comisión de Educación, presidida por el radical Gustavo Pujato, en la que el PRO, la CC y LLA reunirían los votos necesarios más allá de la voluntad radical. Hasta aquí parece sencillo.

El primer escollo serio para la iniciativa de la esencialidad del empleado municipal lo encontramos en la comisión de Salud presidida por Diego Garcia (UxP) e integrada por tres ediles radicales: si la oposición se mantiene firme en el rechazo con sus cuatro votos, el radicalismo deberá hacer algo más que abstenerse porque caso contrario hasta aquí llegaría el derrotero.

Desde ya que no vale la pena simular o adivinar una votación en el recinto o imaginar un tratamiento express porque la difusión en las comisiones internas parece ser la clave, ya que sin el visto bueno de todas las fuerzas que integran el oficialismo el proyecto naufragará en las tórridas aguas del deliberativo. ¿Hay algún indicio de reparos a la iniciativa desde el radicalismo?. Alguno dirá que el recorrido del proyecto es quizás demasiado largo, pero desconocemos si fue consensuado o no con el Ejecutivo, ya que un debate largo le serviría a Montenegro para mantener el control de agenda pública con un tema que sirve para simular gestión, autoridad y también como herramienta de negociación. No es menos cierto que el radicalismo aún no se ha expresado en relación a este tema.

En definitiva este culebrón se extenderá, de no mediar sorpresas, por lo menos hasta entrado el mes de junio, y dependerá de las urgencias de un oficialismo asfixiado financieramente el lugar que ocupe en la agenda pública. Por lo tanto: ¡calma radicales!, que aún hay tiempo.

Para este martes está convocada una Marcha en Defensa de la Educación Pública que ha dejado en carne viva las diferencias entre buena parte del radicalismo y sus ¿socios? del PRO que cada día se muestran más comprometidos con la causa libertaria, aunque cada día sabemos menos en relación a la causa libertaria.

El Presidente de la Nación se encargó de agredir, algo que ya no sorprende pero debería indignarnos, a todo aquel que se atreva a mencionar siquiera la importancia de la educación pública en la cultura argentina e incluso amenazó con implementar el protocolo antipiquetes que en realidad es una amenaza a la libertad de manifestarse, pero más allá de eso también anticipó que este lunes se comunicará con “los argentinos de bien” por medio de la Cadena Nacional de Radiodifusión a las 21hs., supuestamente para referirse al “éxito en las metas macroeconómicas” pero algunos coquetean con la idea de anuncios que tiendan a morigerar la licuación del presupuesto universitario por medio de otros recortes y así lograr torcer el brazo de algunos rectores. La lógica indica que sería demasiado tarde, pero ya sabemos bastante acerca de cómo funciona la lógica en nuestro país.

Hasta aquí llegamos con este resumen para iniciar esta semana que nos deparará alguna que otra sorpresa, esperamos que hayan disfrutado la lectura.

Hasta la próxima.